Por Alejandro Moreno
Tan solo 6 de cada 10 restaurantes lograron resistir las dificultades que se presentaron durante el 2020, pero esperamos que con la reactivación económica y hasta que concluya el proceso de vacunación la pandemia sea cosa del pasado, señaló Roberto G. Cantón Barros presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
De los 16 mil establecimientos de ventas de alimentos y bebidas un 40 % cerró en julio del año pasado y otro 20 % cerró en los meses siguientes donde se estima se perdieron unos 70 mil empleos.
A nivel nacional se calcula que 122 mil restaurantes cerraron sus puertas y que 8 de cada 10 no sobrevivirá a la contingencia sanitaria por COVID-19 lo que implica una pérdida de 400 a 450 mil empleos, añadió.
Los restaurantes que no sobrevivieron fue porque no pudieron pagar la renta, la nómina de los empleados o no se lograron adaptar al servicio a domicilio, comentó el restaurantero.
Con la reactivación económica el mes de julio se permitió un 25 % del aforo, en noviembre el 50% y para diciembre el 60 % que se mantiene actualmente.
Para el fin del año las ventas y afluencia de clientes repuntaron un poco en comparación con el resto del mes, se calcula que entre un 50% y un 60% abajo del mismo periodo que al mismo período del año 2019.
Ante este panorama Cantón Barros dijo que hay esperanza en que las medidas sanitarias adoptadas en el estado han apoyado a mantener la pandemia bajo control, por eso exhortamos a la población a no bajar la guardia a fin de evitar dar marcha atrás al Plan de Reapertura Económica.
En cuanto al incremento en los precios de la gasolina dijo que también es de esperarse un aumento en los precios de los insumos que generarán inflación y un alza generalizada en los costos de bienes y servicios.
Estos aumentos nos afectan a todos y generan más crisis en medio de una situación que ya es complicada cuando venimos de un año atípico en el cual las empresas se han visto gravemente perjudicadas, indicó.